Lección de vigilancia

Es propio al ser humano tener, por naturaleza, tres tipos de actitudes: unas que él tiende a transformar en hábitos; otras, inclinadas a entregarse al dominio de lo que es lenta y sabiamente variable; y, por fin, unas terceras, ávidas de lo rápidamente mutable, de lo sorprendente y hasta de la aventura.

La verdadera bomba atómica

La verdadera bomba atómica En los tiempos en que el Derecho Internacional, con sus reglas límpidas y generalmente aceptadas, inspiradas en la Ley Natural y en la Doctrina de la Iglesia, estaba profundamente fundamentado en la consciencia de los pueblos, la fuerza no era el valor supremo de la vida internacional. Había a la luz […]

Lágrimas, milagroso aviso

Los diarios del 21 de julio de 1972 publicaron una fotografía procedente de la ciudad de Nueva Orleans, en los Estados Unidos, en la cual se veía una imagen de Nuestra Señora de Fátima vertiendo lágrimas.

Ad te levavi oculos meos

Inseguros, como todo el mundo, acerca del día de mañana, elevamos nuestros ojos en actitud de oración hasta el trono excelso de María, Reina del Universo.

«El pueblo que habitaba en las tinieblas vio la gran Luz»

La verdadera piedad debe impregnar toda el alma humana, y, por tanto, también debe despertar y estimular la emoción. Pero la piedad no es sólo emoción, y ni siquiera es principalmente emoción. La piedad brota de la inteligencia, seriamente formada por un cuidadoso de la doctrina cristiana, por un conocimiento exacto de nuestra Fe, y, por tanto, de las verdades que deben regir nuestra vida interior. La piedad reside también en la voluntad. Debemos querer seriamente el bien que conocemos. No nos basta, por ejemplo, saber que Dios es perfecto. Necesitamos amar la perfección de Dios, y, por tanto, debemos desear para nosotros algo de esa perfección: es el ansia de santidad.

Sublimidad y pureza

Sublimidad y pureza. El espíritu revolucionario, esencialmente igualitario e impuro, execra todo lo que es sublime y casto; tiene amor a lo banal, a lo trivial, cuando no a lo más bajo. Por eso fue grande el odio suscitado en los revolucionarios por ocasión de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción de María. […]

Instaurando una Cristiandad “cœliforme”

Instaurando una cristiandad coeliforme En el universo que conocemos y con el cual tenemos un contacto continuo – por lo tanto, excluyendo los ángeles que no hacen parte de nuestro universo visible – lo más elevado que existe es el alma humana. La experiencia muestra que cuando tenemos amigos en quienes podemos confiar plenamente, a […]

La TFP Ecuatoriana felicita al nuevo embajador de Ecuador ante la Santa Sede

La Sociedad Ecuatoriana de Defensa de la Tradición, Familia y Propiedad -TFP- felicita al nuevo Embajador ante la Santa Sede, Don Edmundo Uribe Pérez, quien ha sido presidente de nuestra entidad, y hace votos a la Santísima Virgen para que bendiga su actividad diplomática en favor de Ecuador, como nación católica y consagrada al Sagrado Corazón de Jesús.

Solemnidad de la Asunción de la Virgen

¿A qué católico fervoroso no le gustaría presenciar, aunque fuese por breves momentos, los misteriosos y sublimes hechos sucedidos antes, durante y después de la Asunción de la Santísima Virgen al Cielo? Para saciar un poco esta curiosidad, el Dr. Plinio Corrêa de Oliveira expone de una forma muy didáctica y atrayente algunas revelaciones privadas de Sor María de Ágreda al respecto de este misterio de la vida de María Santísima.

Concepto católico de libertad, igualdad y fraternidad

Es propio al ser humano tener, por naturaleza, tres tipos de actitudes: unas que él tiende a transformar en hábitos; otras, inclinadas a entregarse al dominio de lo que es lenta y sabiamente variable; y, por fin, unas terceras, ávidas de lo rápidamente mutable, de lo sorprendente y hasta de la aventura.